- Se ha demostrado que la luz UVC (254.7nm) detiene la replicación y propagación de todos los virus (incluido el Coronavirus). Al destruir la sección de ADN responsable de su replicación, el virus ya no puede infectar ni propagarse.
- Hablando científicamente la luz UVC es absorbida por las bases de ARN y ADN, causando la fusión fotoquímica de las pirimidinas, lo que hace que las bases no puedan emparejarse. Esto da como resultado un virus inactivo (Perdiz, 2000).
- Un equipo se propuso probar específicamente este fenómeno en SARS-CoV, una cepa de coronavirus que tuvo un brote por primera vez en 2002. Este estudio encontró que la exposición a la luz UVC inactivo este tipo de coronavirus (Darnell et al., 2004).

- Alta eficiencia de trabajo, comparado con otros sistemas por aspersión y limpieza manual.
- Bajos costos, no requiere supervisión directa ni equipos de trabajo para realizar la sanitización.
- Completamente desinfectado, la mezcla de UVC + Ozono permite limpiar superficies por la luz y las zonas que no están expuestas se limpian por el Ozono.
- Sin productos químicos nocivos residuales, no tiene efectos corrosivos como los desinfectantes líquidos.